martes, 27 de octubre de 2009

Conejillos de Indias para la vacuna contra el A-H1N1

LA NOTICIA DOCUMENTADA

Dos millones de puertorriqueños serán usados para probar la seguridad
y conocer los defectos de la vacuna


13 de octubre de 2009
Por Marta Villaizán Montalvo
martavi@onelinkpr.net

El departamento de Salud de Estados Unidos se apresta a realizar en Puerto Rico un experimento en masa con la vacuna contra el A-H1N1 con el propósito de probar su seguridad y conocer sus defectos. Así se desprende de las expresiones de la secretaria de Salud, Kathleen Sebelius durante una vista ante el Congreso que fue reseñada por El Nuevo Día el pasado 16 de septiembre.

El carácter experimental de la nueva vacuna lo confesó la misma secretaria de Salud estadounidense cuando reveló que debido a que se planifica administrar la vacuna por la vía de urgencia, es necesario que se lleve a cabo una vigilancia “intensa” sobre la seguridad y eficacia después de la inoculación.

“La presión del tiempo significa que los datos clínicos en el momento que la vacuna sea administrada serán inevitablemente limitados”, explicó la funcionaria. “Serán necesarias más pruebas sobre la seguridad y la eficacia después de que haya comenzado la administración de la vacuna”, agregó.

La noticia, sin embargo, no menciona si la secretaria aprovechó la oportunidad para explicar a los congresistas que cuando se dice que es necesario llevar a cabo una “vigilancia intensa sobre la seguridad y eficacia de la vacuna después de su administración”, de lo que se está hablando en realidad es de un cuestionable experimento con seres humanos.

GRUPOS DE ALTO RIESGO
Pero mientras Kathleen Sebelius confiesa que no es posible certificar la seguridad y eficacia de la vacuna contra el virus A-H1N1, aquí en Puerto Rico la sub-secretaria de Salud, Concepción Quiñones de Longo, contradice sus señalamientos afirmando que no deben existir controversias por el contenido de la nueva vacuna, “ya que la misma es segura”.

Sin embargo, en lo que sí están de acuerdo Sebelius y Quiñones es que el gobierno de los Estados Unidos quiere que la gente con alto riesgo de sufrir la gripe porcina sea la vacunada antes.
Pero… ¿quiénes son aquellos con “alto riesgo” de sufrir la fiebre porcina?
La respuesta la ofreció el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, (CDC por sus siglas en inglés) en un informe difundido por la prensa en Estados Unidos, (no en Puerto Rico), el pasado 28 de agosto.
Con su habitual tono degradante y de exclusión social, el CDC afirma que los hispanos y los afroamericanos tienen más probabilidades que los anglosajones de tener complicaciones cuando se enferman con el virus A-H1N1.
“Entre abril y julio los afroamericanos tuvieron la tasa más alta de hospitalización (9 por cada 100,000) seguido por hispanos (8 por cada 100,000), en comparación con los anglosajones (2 por cada 100,000)”, señala el documento.
Con esta estadística de dudosa credibilidad, el CDC justifica el uso de las minorías para llevar a cabo una vigilancia “intensa” sobre la seguridad y eficacia después de la inoculación de la nueva vacuna contra el A-H1N1.

2 MILLONES DE CONEJILLOS DE INDIAS
Con una población de poco más de 4 millones de nacionales puertorriqueños catalogados como minoría étnica, las autoridades de salud estadounidenses apuntan a que Puerto Rico es el lugar idóneo para evidenciar los efectos secundarios, que como señalara la Sra. Sebelius, “pueden hacerse más patentes cuando un gran número de personas recibe una vacuna pandémica”.
Y para rastrear esos efectos secundarios “después” de la administración de la vacuna, el gobierno de los Estados Unidos, a sabiendas y en complicidad con el gobierno de Puerto Rico, han concebido un plan de vacunación masiva contra el A-H1N1.
“El gobierno federal y la jefatura del departamento de Salud en Puerto Rico han estado trabajando en un plan estratégico para vacunar un porcentaje alto de la población”, reveló la Dra. Quiñones. “En un periodo corto se establecerán centros de vacunación en toda la Isla”, agregó.
Según la pediatra, los primeros vacunados serán los trabajadores de la salud (50,000) y cuidadores de niños menores de 6 meses (125,000), seguidos por las embarazadas (50,000), niños y jóvenes de seis meses a 24 años (1,225,000) y personas entre 25 y 64 años con condiciones crónicas como asma, diabetes y cáncer (500,000).
Si se toma en cuenta que cada mujer embarazada carga en su vientre por lo menos un (1) pequeño puertorriqueño, la vacunación en masa contra el A-H1N1 en Puerto Rico alcanzaría el irracional y desproporcionado número de 2 millones de personas.
2 millones de Conejillos de Indias que serán usados para probar la seguridad y conocer los defectos de una vacuna contra un virus que hasta ahora ha resultado mayormente benigno.

jueves, 15 de octubre de 2009

THIMEROSAL en las Vacunas, El Autismo, Retraso del Habla, El Déficit de Atención y la Hiperactividad

Carmen M. Colón de Jorge

Jueves, 24 de septiembre de 2009

El Thimerosal, es un preservativo opcional para los fabricantes de vacunas que ha sido prohibido alrededor del mundo menos en Estados Unidos.

Es un hecho indiscutible que el thimerosal fué eliminado de las vacunas en muchos países hace mas de 20 años por su relacion dramática con el autismo, el retraso en el habla y deficit de atención y la hiperactividad.

Lo lamentable es que la tan esperada vacuna para la influenza AH1N1 tiene el preservativo Thimerosal, y más lamentable es que nos tienen atrapados en el miedo y no hay quien tenga la osadía de protestar.

En 1977, un estudio ruso encontró que adultos expuestos al ethylo de mercurio, la forma de mercurio en Thimerosal, sufrían daño cerebral algunos años después.

En 1980 estudios sobre el envenenamiento por thimerosal también describen una necrosis tubular y lesiones en el sistema nervioso, incluyendo coma y muerte.

Como resultado de estos hallazgos, Rusia reponsablemente prohibió el Thimerosal en las vacunas para niños. En Dinamarca, Austria, Japón, Gran Bretaña y todos los países escandinavos también han prohibido el preservativo. Aparentemente debemos pensar que en todos esos países los científicos rechazan el Thimerosal en las vacunas por puro capricho.

En junio del 2000 evidencia estadística relaciona al Thimerosal con desórdenes del sistema nervioso por lo que oficiales federales y representantes de la industria fueron reunidos por los Centros de Control y Prevención de Enfermedades. CCPE, para discutir la perturbadora evidencia del Dr. Tom Verstraeten, un epidemiólogo que analizó la información en la base de datos del CCPE, donde el Thimerosal apareció ser el responsable para el dramático incremento en autismo y otros desórdenes neurológicos.

El Dr. Verstraeten les dijo en la reunión, que un número de estudios previos indicaba un vínculo entre el Thimerosal y los retrasos del habla, el desorden de déficit de atención, hiperactividad y autísmo.

El Dramático Caso del Autismo

El autismo afecta de 500.000 a 1.5 millones de estadounidenses, y ha crecido a una proporción anual del 10 al 17% desde finales de los años ochenta. California encontró un incremento de un 273% en autismo, entre 1987 y 1998. Maryland reportó un incremento del 513% en autismo entre 1993 y 1998, y varias docenas de otros estados reportaron hallazgos similares.

Algunos científicos dicen que el número estimado de casos de autismo se ha incrementado unas 15 veces, es decir un 1.500% desde 1991, cuando el número de vacunaciones en niños de duplicó. Mientras que uno de cada 2.500 niños fué diagnosticado con autismo antes de 1991, uno en 166 niños tienen ahora la enfermedad.

Mercurio en Thimerosal

El Thimerosal contiene 49.6% de mercurio por peso, y es metabolizado o degradado a etilo de mercurio y tiosalicylate. El mercurio, o más precisamente el etilo de mercurio es el principal agente que mata a los contaminantes. Estudios indican que el mercurio tiende a acumularse en el cerebro de los primates y otros animales, después de haber sido inyectados con vacunas.

Dr. Vijendre Singh del Departamento de Farmacología en la Universidad de Michigan encontró una mayor incidencia de la vacuna contra los anticuerpos del sarampión, paperas y rubeola (MMR) en niños autistas.

Centro Nacional de Informaciones sobre Vacunas en Viena, Virginia, ha observado una fuerte asociación entre la vacuna MMR y características autistas. Reportando similares hallazgos.

Grupo de Apoyo de Encefalitis en Inglaterra, afirma que los niños que se volvieron autistas después de la vacuna MMR comenzaron a mostrar síntomas autistas, tan temprano como 30 días después de la vacunación

Según el FDA (Administración de Alimentos y Drogas), a estos hallazgos los llama “inconclusos” y niegan el riesgo de una relación causal entre el thimerosal y el autismo.

El Encubrimiento y Compra de Consciencias

El Dr. Tom Verstraeten, uno de los presentadores de evidencia epidemiológica en la reunión del CCPE, en el año 2000 el que vigorosamente hacía campaña en contra del Thimerosal, basado en su correlación “inconclusa”, pero después de que lo contrataran Glaxo-Smith-Kline, el doctor cambió su posición. Esto nos debe hacer reflexionar “ que la vida es peligrosa no por las personas que hacen el mal, sino por los que se sientan a ver lo que pasa”, Albert Eintein ,1879-1955. asi es que contentos y conformes a vacunar nuestros niños con thimerosal.

Carmen M. Colón de Jorge, Lcda. en Farmacia y Naturopatía
Doctor of Naturopathy Reg.275 Washington D.C.
ExPresidenta de la de la Junta Examinadora de Naturópatas de P.R.
naturopatiahoy@gmail.com

http://www.analitica.com/va/medicinaysalud/opinion/2496932.asp

¿Es segura la vacuna contra la fiebre porcina?

A la vez que las compañías farmacéuticas alrededor del mundo corren a preparar la vacuna contra el virus de la fiebre porcina (H1N1) como anticipo ante una posible epidemia durante este otoño, todavía quedan por aclarar y resolver muchos asuntos relacionados con la seguridad de dicha vacuna.

Los titulares de prensa informan que uno de los asuntos más importantes gira alrededor de si las vacunas contendrán un aditivo o adyuvante -una sustancia que refuerza el sistema inmunitario- para que el suministro de la vacuna dure más. Los adyuvantes, según el Vaccination Risk Awareness Network (vran.org) de Canadá, podrían contener químicos peligrosos como mercurio (en el tiomersal o timerosal), aluminio y formaldehido, los que han sido vinculados a trastornos neurológicos. La Coalition for Sensible Action for Ending Mercury-Induced Neurological Disorders (SafeMinds.org) ha expresado sus preocupaciones sobre estos adyuvantes y sus posibles riesgos a la salud. La Coalición dice que se quedaron sin contestar muchas preguntas sobre la seguridad de la vacuna en una sesión pública recientemente auspiciada por los Centros para el Control y Prevención de las Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). La información oficial del CDC está publicada en cdc.gov/h1n1flu.

Otra preocupación general proviene de la forma cómo las farmacéuticas están presionando una “aprobación acelerada” para ganar una carrera a contra tiempo. Hoy día se llevan a cabo ensayos clínicos alrededor del mundo con sujetos de todas las edades, sin incluir, sin embargo, mujeres embarazadas -aunque éstas conforman el grupo elegido como objetivo de vacunación.

Según lo que es, la vacuna contra el virus H1N1 está clasificada como una droga clase C, lo que significa que no ha sido evaluada como potencial carcinogénico o mutagénico; aparte de que no se han realizado estudios en animales para investigar daño fetal.

Articulo de la revista Natural Awakening Octubre 2009 pagina 15
http://www.na-pr.com/search?Query=vacunas&submit.x=0&submit.y=0&fromSmall=true&searchWhat=searchAll&searchField=searchContentBody&searchField=searchContentBody